Arte conceptual

Sinopsis
En la década de 1960, el artista norteamericano Sol LeWitt habló de Conceptual Art (arte conceptual) para referirse a una tendencia artística en la que la realización de la obra tenía una importancia secundaria. Lo importante eran la concepción o la idea que servían de base. En lugar de las piezas realizadas artesanalmente, los esbozos, los textos escritos y hasta las meras indicaciones recibían la consideración de obras de arte autónomas. Un aspecto muy destacado es la desmaterialización del arte, es decir, el completo desarrollo y realización de la obra en la facultad perceptiva del espectador, quien actualiza en cada caso la concepción de la misma. Por su crítica inmanente de las instituciones y su cuestionamiento del concepto tradicional del arte, la corriente conceptual adquiere nuevo interés como modelo alternativo justamente en una época en la que se registran un desbordamiento medlático de la imagen y una reactivación de formas artísticas supuestamente conservadoras como la pintura.